Hacía tiempo que no subía una pintura. Esta es una de las primeras que hice en mi vida. El juego de luces y sombras es lo que le da algo de interés a esta composición que, lejos de ser una buena obra, al menos es sugerente y uno cuando la ve puede decir algo así como: "Mira, qué gracia".
Evoca las tardes de verano, a esas horas en las que la chicharra se hace dueña del viento, el olor a salitre impregna los toldos amarillos, y el vaivén de las olas de un mar cercano le arrullan a uno invitándolee a acompañarlas por encima de la no-muerte. Magníficos momentos.
Japo.
Very nice
ResponderEliminarMola
ResponderEliminarEsta bien me gusta!!!
ResponderEliminarI like it!
ResponderEliminarNo se que decir...
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